4 de febrero de 2021

RUTA BTT: LOS VALLES

RUTA POR LOS VALLES CERECEDA, VALMAYOR Y NAVALMANZANO


INFORMACIÓN DE LA RUTA
Kilómetros: 45 aprox.
Fecha: Mayo/2013
TRAMOS:
Hasta el Collado del Valle 11.0 km
Hasta el badén del Río Valmayor 21.2 kmzz
Hasta el Collado del Encebre 28.0 km
Hasta Fuencaliente 45.3 km

ANTES DE SALIR

Es una ruta circular, alrededor del macizo de La Bañuela (1.323 m.), y que pasa por tres de los valles más bonitos de las sierras de Fuencaliente: Cereceda, Valmayor y Navalmanzano. Tiene algunas pendientes muy pronunciadas, y actualmente (mayo, 2013) hay algunos tramos del camino en malas condiciones, especialmente la subida al Collado del Encebre. La descripción comienza en Fuencaliente, pero también se puede salir desde las inmediaciones del campo de fútbol La Dehesa, que se encuentra a unos 2.5 km de Fuencaliente; se puede deja aquí el coche, si es el caso, pues aquí volveremos al final de la ruta. La ruta no está señalizada y atraviesa dos cotos de caza, Montes de Fuencaliente y Valmayor, por lo que no se deben dar voces, no hay que salir del camino, y no se debe pasar si hay montería. Y una advertencia: la ruta puede suponer tener problemas con los guardas de la finca Valmayor que pueden impedirnos el paso. Si no quieres problemas, no hagas esta ruta. No se debe considerar esta descripción como una ruta abierta que se pueda realizar libremente. Si eres un turista que no conoces esta zona y tienes intención de caminar por este Parque Natural, la oficina de Turismo de Fuencaliente se encuentra en la calle Mayor, 41, teléfono 926 470 288. 

Ruinas de la casa de Navalmanzano

La ruta discurre por los siguientes caminos públicos del Ayuntamiento de Fuencaliente: Camino de la Cerecea, Camino de los Cortijos de Valmayor, Camino de Valmayor por Hontanillas, Camino de Navalmanzano y Camino de Peñaescrita (algunos tramos de los mismos son también vías pecuarias). Todos estos caminos figuran descritos en el Inventario de Caminos Públicos de Fuencaliente aprobado en el año 2003. La propiedad de la finca Valmayor se ha opuesto a que sean inventariados como de propiedad pública los caminos que atraviesan la finca; pero estos caminos han sido siempre de uso público, y así vienen recogidos en todos los mapas del Instituto Geográfico Catastral y en los mapas municipales de deslinde y amojonamiento del término municipal. Independientemente de su propiedad pública o privada, los caminos vecinales de uso público existen desde siempre y figuran en los mapas. Cuando los actuales dueños de la finca Valmayor empezaron a comprar, a finales de los años sesenta, todos los pequeños cortijos que había en el valle ya existían los caminos de uso público y las vías pecuarias que atraviesan el valle en dirección a los pueblos cercanos (Solana del Pino, Fuencaliente y Andújar).Si no conoces el terreno lleva un Gps porque no hay buena cobertura de telefonía móvil. Respeta la naturaleza y a las personas y animales que te encuentres.

Collado de Valmayor

RUTA: TRAMO 1

Salimos de Fuencaliente, desde el bar Tropicana, por la carretera en dirección norte hacia Puertollano; cruzamos el Río del Pueblo por el Puente de la Yedra y nos incorporamos a la carretera N-420. Seguimos por la carretera hasta el km. 101.6 donde encontramos un desvío a la derecha hacia las pinturas rupestres de Peñaescrita. Tras una pequeña subida llegamos a un cruce, junto al que se encuentra el campo de fútbol La Dehesa. Este punto también es un buen lugar para empezar, pues hay buen aparcamiento, y aquí cerraremos el círculo que describe la ruta. 

En el cruce, siguiendo la ruta dejaremos la pista asfaltada y seguiremos las indicaciones de las pinturas rupestres de La Batanera, dejando el campo de fútbol a nuestra derecha. Si tenemos decido hacer la ruta en sentido contrario, giramos a la derecha por la pista asfaltada en dirección a Peñaescrita.

Vamos subiendo, dejando un camino a la izquierda, y seguimos hasta llegar a la casilla de los Arrayanes que se encuentra junto a las pinturas de La Batanera. Las pinturas rupestres están abajo, junto al río Cerecea. Si tenemos tiempo podemos visitarlas y ver también la Chorrera de los Batanes que se encuentra junto a las pinturas. A nuestra izquierda se encuentra el Peñón de la Higuera, en cuya cima se encuentran restos de una poblado calcolítico. Este es un punto de unión de varias vías pecuarias de Fuencaliente: la Colada del Pueblo, por donde hemos venido; la Vereda de las Navas, por donde seguiremos; y el Cordel de Puerto Suelta, que sube desde el río y cruza subiendo hacia el Collado de los Lobos que se encuentra a nuestra izquierda.

Seguimos de frente y vamos entrando en el Valle de la Cerecea, formado por Sierra Madrona, a la izquierda, y la Sierra de Hornilleros, a la derecha. La ruta sube remontando el valle, siempre con el río a la derecha; pasamos al principio junto a algunos cortijos y huertos para llegar finalmente al Collado de la Cerecea (Km 10.0), donde termina este valle. Aquí entramos en el Robledo de la Cereceda que, junto con el Robledo de las Hoyas y el Robledo de Hontanillas, es uno de los tres robledales emblemáticos de las sierras de Fuencaliente. En el collado hay un cruce de cuatro caminos y seguiremos de frente; el de la derecha es un camino maderero, el de la izquierda es la vía pecuaria Vereda de las Navas, y el que sigue de frente, por donde continuaremos, es la vía pecuaria Vereda del Valle.

Después de un kilómetro, entre el robledal, llegamos al Collado del Valle (GPS 38º 26' 34.3"/ 04º 13' 42.2") (Km 11.0), donde encontramos la entrada a la finca Valmayor. En la entrada a la finca hay un puerta y la dejamos cerrada al pasar. En la puerta había un cartel que indicaba que circulamos por una vía pecuaria, pero curiosamente ha desaparecido. La vía pecuaria, descrita y clasificada legalmente, mide 20 metros y 89 centímetros de anchura y se llama Vereda del Valle. La Vereda del Valle baja todo el valle del río Valmayor, sale del valle por el paso de Las Escaleruelas o Las Calderas, y continúa en dirección a Andújar. Como no está deslindada debemos argumentar que la vía pecuaria irá siempre por el sitio mas favorable para pasar (el camino), y no por donde le interese a la propiedad. En otro caso debería la propiedad solicitar el deslinde y amojonamiento de la vía. 

El valle del río Valmayor, o simplemente El Valle como se le conoce en la zona, está formado por Sierra Madrona a la izquierda y las sierras de Navalmanzano y Quintana a la derecha. En El Valle vivían numerosos vecinos hasta los años 60 y 70, pero actualmente pertenece a un solo propietario y está dedicado a coto de caza.

Excursión por Valmayor

RUTA: TRAMO 2

Una vez que cruzamos la puerta empezamos la bajada por el camino público llamado de los Cortijos del Valle, que coincide también con la vía pecuaria Vereda del Valle. Enseguida encontraremos una puerta de hierro que ha colocado la propiedad de la finca para evitar que circulen vehículos. Como quieren impedir el paso a todo el mundo, la puerta está cerrada con candado y no han dejado un paso habilitado, como deberían. Ya hemos dicho que es un camino público, y como tal aparece en el Inventario y en la Ordenanza de Caminos Públicos del Ayuntamiento de Fuencaliente, y que además es una vía pecuaria. Por la derecha de la puerta se puede pasar con alguna dificultad.

En una rápida bajada llegamos al puntal del cortijo de Julio Alonso, donde hay un cruce de caminos en el que giraremos a la izquierda. Seguimos por la pista de la izquierda, siguiendo la señal, y tras cruzar una cadena que normalmente esta abierta, llegamos a una bifurcación en la que continuamos por la derecha. Por la izquierda se sube al cortijo llamado antiguamente Cortijo de Don Alejandro. Un poco más adelante se incorpora por la izquierda un camino que también baja del mismo cortijo.

Seguimos hasta un pequeño collado con muy buenas vistas (GPS 38º 25' 57.5"/ 04º 11' 24.5") (Km 15.0) con un gran alcornoque que invita a descansar. En este collado hay un cruce; seguimos por la izquierda, ignorando la señal, aunque los dos caminos se vuelven a unir mas adelante. Si seguimos por la derecha, a 300 metros pasamos por delante del antiguo Cortijo de León, hoy casa principal de la finca Valmayor; y girando a la izquierda delante de la casa nos uniremos al camino principal unos 200 metros mas adelante. Esta misma circunstancia hay que tenerla también en cuenta si hacemos el camino al revés. Aunque hoy día todo el Valle de Valmayor es un gran coto de caza, hasta finales de los años 60 vivían en él muchas familias y este cortijo era uno de los más grandes que había.
Pilar del Cortijo de Heliodora

Continuamos hasta llegar a las ruinas del Cortijo de la Heliodora (Km 16.0) donde hay una fuente junto al camino; el lugar tiene estupendas vistas sobre el valle del Valmayor y la umbría de Sierra Quintana. Cruzamos la Garganta de los Alisos y la Garganta del Peñoncillo y pasamos por las ruinas del Cortijo de Donaciano. Seguimos siempre recto y dejamos a nuestra izquierda las ruinas del Cortijo de Felipe. Sin desviarnos cruzaremos la Garganta del Perro, la Garganta de los Serranos y pasaremos junto a las ruinas de otros cortijos, como el Cortijo de los Serranos.

Continuamos por terrenos adehesados hasta llegar a un cruce de cuatro caminos (GPS 38º 24' 47.8"/ 04º 09' 31.0") (Km 19.5), justo antes de llegar a un gran cortijo abandonado, conocido como Los Cortijos, ya que en realidad eran varios cortijos juntos (En los mapas aparece como Cortijo de Sales). En este cruce podemos acortar la ruta girando a la derecha para bajar directamente a cruzar el río y comenzar el regreso por la umbría del valle. 

Continuando normalmente la ruta, sin acortar hacia el río, pasamos las ruinas de Los Cortijos, o Cortijo de Sales, y seguiremos hasta encontrar más adelante, justo antes de cruzar la Garganta de la Azotada, un camino que se une por la derecha (GPS 38º 24' 06.3"/ 04º 08' 50.1"). Este punto es el final de la ruta (Km 21.9); giramos bruscamente a la derecha por este camino, llamado de Valmayor por Hontanillas, y volvemos río arriba hasta encontrar el badén por el que cruzaremos el río Valmayor. Si te has pasado este cruce llegarás a la casa de la Víbora, donde vive uno de los guardas de la finca.

Pedriza de Suelazapato
Si no nos hemos perdido, que será fácil, habremos llegado al Badén (GPS 38º 24' 26.7"/ 04º 10' 3.0") (Km 23.8). Por un badén de cemento cruzaremos el río frente al Cerro de la Mina. Si lleva mucha agua es peligroso y es mejor no cruzar y seguir río arriba por el camino que va por la margen derecha hasta llegar al Puntal del Cortijo de Julio Alonso y regresar por donde vinimos.

Aguas abajo del río Valmayor, donde éste abandona el valle, se encuentran "Las Calderas", un espectacular paisaje formado por un estrecho de crestones de cuarcitas que ha sido erosionado por el río formando tres pozas o calderas que dan nombre al lugar. En Las Calderas se encuentran también las pinturas rupestres de la Cueva de Melitón. Para llegar desde el badén hay que bajar andando unos 3 km. río abajo. 

Justo al cruzar el badén del río Valmayor se encuentra la Mina Romana, de la que se extraía plomo y plata (galena argentífera). La boca principal se puede ver al lado del río en una pequeña explanada que queda a la izquierda del camino, a unos 100 metros del badén río abajo. Otra de las bocas, tapada, queda justo en el talud derecho del camino. La mina, que ha sido explorada y estudiada recientemente, ya era explotada en tiempos de los romanos y a ellos debe su nombre. Según el Diccionario de Madoz, en 1847 hacía poco que se había creado una sociedad para volverla a explotar. Hoy día es un espacio protegido declarado Microreserva "Refugios de Quirópteros de Fuencaliente".

La microrreserva Refugios de Quirópteros de Fuencaliente fue declarada mediante Decreto 282/2003, de 23 de septiembre de 2003, (DOCM núm. 143 de 6 de octubre de 2003). Está formada por las cuevas de dos antiguas minas: la mina de Las Lastras y la mina Romana de Valmayor. Es el refugio de cría de quirópteros mas importante de Castilla - La Mancha y uno de los mas importantes de España. Aquí crían unos 5000 murciélagos de 7 especies distintas, destacando el murciélago ratonero grande (Myotis myotis), del que se llegan a contar más de 3000 ejemplares durante la época de cría, según se declara en el propio decreto de declaración de Microreserva.

Pedriza de El Libro
RUTA: TRAMO 3

Por el badén de cemento cruzamos el río y pasamos a la umbría y seguimos la ruta, ya de regreso, por el camino de Valmayor por Hontanillas. Desde el badén el camino va subiendo, rodeando el Cerro de la Mina que se queda a la izquierda, hasta llegar a un cruce que puede inducir a error pues parece que por la derecha sería la dirección correcta (Km 26.2). El camino correcto es el de la izquierda para seguir remontando la falda de la sierra; el camino de la derecha, aunque lleva dirección correcta hacia el Collado del Encebre, se adentra en el Arroyo de Navaloscorchos y no tiene salida hacía donde nos dirigimos.

Siguiendo la ruta, a unos 400 metros mas adelante, dejamos un camino a la izquierda que lleva al Cortijo de la Mina Romana, en lo alto del Cerro de la Mina. Este cruce no lleva a confusión salvo que hagamos la ruta en sentido contrario. Tras pasar una cadena llegamos al Cortijo de la Tejera, donde vive uno de los guardas de la finca (GPS 38º 24' 00.5"/ 04º 10' 42.8" ). Seguimos por la derecha de la casa, en dirección oeste, y enseguida encontramos una puerta por donde abandonamos la finca Valmayor y entramos en el Robledal de Hontanillas, de los Montes de Fuencaliente. La puerta debería estar abierta siempre pues es camino público, pero no es raro que los guardas la cierren y tengamos que andar buscando un paso alternativo. Cuando cruzamos la puerta abandonamos la finca Valmayor y entramos en los Montes de Fuencaliente. 

Empezamos una larga subida para abandonar el valle de Valmayor. A nuestra derecha llevamos el Arroyo de Navaloscorchos, en cuya cabecera se encuentran las pinturas rupestres de La Golondrina. No se encuentran en los cortados de la cresta de la sierra sino en un peñón aislado junto al cauce del arroyo, pero muy cerca de su nacimiento, una vez pasado el camino que conduce a la casilla del guarda. Su acceso no es fácil ya que se encuentran dentro de la finca Valmayor.

Tras una larga subida entre robles y quejigos llegamos al Collado del Encebre (GPS 38º 24' 09.7"/ 04º 12' 47.7") (Km 30.5), que debe su nombre al encebre o encebro, el burro salvaje que habitaba en la Península y que se extinguió hacia el siglo XVI. Si vamos con tiempo, desde el Collado del Encebre sale una vereda, imperceptible, que subiendo la umbría de Sierra Quintana nos lleva a las pinturas rupestres del Burcio del Pino. Aquí abandonamos el valle de Valmayor y entramos en el de Navalmanzano.

RUTA: TRAMO 4

Tras un rápido descenso llegamos a la Casa de Navalmanzano (GPS 38º 24' 16.6"/ 04º 13' 51.4") (Km 33.2), por donde pasamos en otra de las rutas. Esta casa, ya en ruinas, es propiedad del Ayuntamiento, que en vez de rehabilitarla, curiosamente contribuyó a su ruina desmontando el tejado y vendiendo las tejas. Tenía agua corriente y un enorme establo que se construyó como parte de un proyecto para dedicar a la ganadería el Quinto (monte comunal) de Navalmanzano. Frente a la casa está la conocida buitrera de Navalmanzano, en los cortados del Peñón de los Arenalejos.

Cortijo de la Tejera

Una vez en la Casa de Navalmanzano, si seguimos de frente llegaríamos igualmente a Fuencaliente, pero en esta ruta abandonaremos la umbría de este valle para cruzar a la solana. Así que hay que buscar justo antes de la Casa de Navalmanzano una pista a la derecha que baja (cuidado, hay una cadena) a cruzar el arroyo de Navalmanzano.

La pista sigue por la Solana de Navalmanzano, bajo el Pico de la Bañuela que con sus 1323 metros es el más elevado de Sierra Morena. Durante este trayecto más o menos llano, hay bonitas vistas, hasta que abandonamos este valle por el Collado del Piruetanal. A la derecha, arriba, vemos la gran mole del Peñón del Escorialejo, donde se encuentran las pinturas rupestres del mismo nombre.

Entramos en el Barranco de Peñaescrita, cruzamos el arroyo del mismo nombre, y llegamos al final de la pista de tierra y comienzo de otra que está asfaltada . Estamos junto a las famosas pinturas rupestres de Peña Escrita.

A partir de aquí, la pista está asfaltada. Bajamos rápidamente, cruzamos el río Cereceda, y llegamos al campo de fútbol y al cruce de La Dehesa, por donde pasamos al comienzo de la ruta. Desde aquí solo nos queda volver a Fuencaliente o al lugar de partida.

Casa de Navalmanzao